Como la mayoría de propietarios de viviendas, probablemente dejes que las manchas y la suciedad se instalen en tus ventanas y esperes a que la lluvia las elimine. ¿Quién puede culparte? Nosotros no lo haremos, desde luego. La limpieza de ventanas no sólo es una tarea tediosa, sino también peligrosa. Imagínate si tienes una casa de dos plantas o vives en el sexto piso de un edificio de apartamentos y tienes que limpiar tus ventanas.
Afortunadamente, el avance de la tecnología ha allanado el camino a los robots limpiacristales, que pueden ayudarte en esta ardua tarea. La adquisición de un robot limpiacristales de alta tecnología es una forma estupenda de mantener limpios los cristales, eliminando el riesgo de lesiones o de que te caigas por la ventana. Aunque su tecnología puede variar según el modelo, un buen robot limpiacristales puede hacer dicho trabajo sin mayor complicación. Así que, si estás buscando una forma de mantener tus ventanas limpias sin complicarte la vida, sigue leyendo para descubrir cómo funcionan estos limpiacristales automáticos.
Un robot limpiacristales te permite limpiar tus ventanas exteriores e interiores con facilidad, incluso las de difícil acceso. Este artilugio inteligente puede lavar una ventana entera de punta a punta en tiempo record y sin riesgos. Además, te avisará cuando haya terminado la tarea.
Un robot limpiacristales combina las últimas tecnologías de limpieza con un movimiento completamente automatizado. Se adhiere a tu ventana con la ayuda de un motor de succión que le permite desplazarse por toda la superfície del cristal. Esto le permite abordar esas ventanas altas a las que normalmente no podríamos llegar con los métodos de limpieza tradicionales.
La mayoría de los limpiacristales robotizados pueden limpiar casi todos los tipos de ventanas. Y aunque algunos tan solo poseen características y funcionalidades básicas, ciertas unidades ofrecen diferentes restricciones de altura, modos de limpieza y funcionalidades adicionales. Algunos modelos cuentan incluso con un sistema de detección de ventanas sin marco para lavar fácilmente puertas y ventanas de cristal.
¿Qué tener en cuenta a la hora de comprar un robot limpiacristales?
Controles y modos de limpieza
Tu robot limpiacristales puede venir con varios modos de limpieza. Estos suelen incluir rutas de limpieza o direcciones que el dispositivo puede seguir. Además, puedes controlar la mayoría de unidades a través de una aplicación para smartphone o un mando a distancia.
Esto es bastante conveniente, ya que puedes sentarte y relajarte mientras tu robot se ocupa de toda la limpieza de ventanas por ti. Y si ves que tu ventana requiere unas cuantas pasadas más, solo tienes que utilizar el mando a distancia para elegir el modo de limpieza adecuado.
Conectividad magnética o succión
Los limpiacristales robóticos cuentan con succión motorizada o conectividad magnética. En el caso de la conectividad magnética, es necesario colocar otra pieza magnética en el lado opuesto de la ventana. En algunos casos, esto puede ser un poco difícil.
Por otro lado, la succión ofrece más comodidad, ya que sólo tienes que colocar el robot en la ventana. Aun así, existe la posibilidad de que este sistema falle. Por lo tanto, es posible que necesites un cable de seguridad conectado a su robot limpiacristales para asegurarte de que tu dispositivo no se caerá mientras realiza su trabajo.
Proceso de limpieza
Aunque la mayoría de los robots limpiacristales utilizan cepillos o paños de limpieza, algunos también pueden utilizar una escobilla de goma, lo que garantiza que tus ventanas queden libres de rayas.
Tu robot puede requerir que lo rellenes con un líquido limpiacristales antes de dejarlo trabajar. Algunas unidades también pueden contar con la capacidad de limpiar espejos, puertas, paredes de ducha y otros tipos de superficies.
Dimensiones y tamaño
El tamaño sí importa, especialmente si dispones de superficies amplias que limpiar. Por ello, elige un limpiacristales automático lo suficientemente grande como para cubrirlas antes de que se le agote la batería.
Duración de la batería
Muchos de estos dispositivos de limpieza cuentan una autonomía de uso relativamente corta. Con una sola carga, estos robots son capaces de limpiar alrededor de 10 ventanas de media. Así que dependiendo del modelo, puedes esperar que estas máquinas duren entre 15 y 30 minutos en funcionamiento. Si tu casa tiene muchas ventanas, asegúrate de optar por un modelo con una batería de mayor duración. Pero ten en cuenta que esto también puede significar que tengas que pagar un poco más.
Almohadillas de limpieza en seco y en húmedo
Esta es una de las características que separan a los modelos de mayor precio de los más baratos. Los robots más caros suelen venir con almohadillas de microfibra para la limpieza en seco y en húmedo.
Las almohadillas húmedas son perfectas cuando se desea utilizar un detergente o limpiador, mientras que las almohadillas secas son excelentes para eliminar el polvo. Estas almohadillas no dejan fibras adheridas en los cristales. Además, son reutilizables y lavables.
Cable de alimentación
Si prefieres un robot limpiacristales con cable de alimentación, busca idealmente una unidad con una longitud de cable generosa. En caso de no encontrarlo, puedes remediar fácilmente este problema con un alargador de primera calidad.
Precio y prestaciones
El precio de los robots limpiacristales de acceso a la gama puede oscilar entre 99 y 159 euros, aunque por lo general ofrecerán funcionalidades básicas. En cambio, los que cuestan entre 175 y 300 euros pueden ofrecer características más atractivas. Pero si quieres una unidad que funcione más rápido, ofrezca numerosas formas de control o tenga sensores avanzados, espera pagar entre 350 y 500 euros o más. Algunos modelos de alta gama vienen incluso con un depósito de agua incorporado para que no tengas que rociar las ventanas manualmente.
¿Cómo utilizar un robot limpiacristales?
Algunos robots limpiacristales son inalámbricos y otros no. Si tienes una unidad con cable, asegúrate de que el cable de alimentación esté bien conectado y con mucha holgura para que el dispositivo pueda moverse sin problemas. No querrás que el cable tire del robot y lo rompa.
Coloca tu robot limpiacristales y mantenlo presionado contra el cristal de la ventana, luego pulsa el botón de encendido. La mayoría de los modelos emitirán un pitido después de tres a cinco segundos, mientras que algunos cuentan con luces LED que se apagarán. A continuación, la unidad comenzará a limpiar de manera autónoma. Cuando termine su tarea, el robot se detendrá por sí solo. Estos versátiles aparatos también son capaces de hacer un buen trabajo en la limpieza de ventanas con una forma particular o asimétrica. Llevan incorporados sensores inteligentes que pueden determinar el siguiente punto a tratar. Una vez determinen que todos los puntos han sido limpiados, se apagarán automáticamente.